El personaje de su última novela dice que nace de su furia, la que no puede plasmar en artículos semanales, porque en una novela se puede sacar esa parte maldita que no se puede decir de otra manera. El título es provocador. El retrato sociológico de las élites es también provocador. Está escrito de manera bien, muy valiente. Y eso es así porque él dice que como persona razonablemente cobarde, así que no le queda otra que correr riesgos como escritor. Y para que se hagan una idea.

Cuando terminó de escribir la novela gritaba Por la casa los he matado a todos. Su mujer no sabía dónde meterse. Yo les hablo del gran Javier Cercas, de su última novela Independencia. Querido Javier, buenos días.

Qué tal? Cómo estás? Buenos días. Muchas gracias por invitarme.

Esta euforia al terminar un libro es propia tuya. Pues no tantas veces me ha ocurrido como en esta ocasión. Sí, sí, aquí tenía la sensación de que me liberaba de muchas cosas. Sí, pero de todos modos, a veces cuando escribo soy eufórico. Sí, eso es verdad. Lo cual es maravilloso. Creo que también el autor, al leerlo, también supongo eufórico. Ese título es provocador.

Independencia. Hay un punto de provocación. Si hay un punto de provocación en muchos sentidos, no, la palabra independencia es maravillosa. Eso hay que decirlo. Lo que pasa es que, como tantas palabras maravillosas aquí en Cataluña, nos las han quitado. Entonces, o sea que ha habido una cosa que ha pasado y tú sabes muy bien que para conquistar la realidad primero tienes que conquistar el lenguaje. Entonces aquí hay una gente que se ha quedado con todas las palabras bonitas, o sea, con la palabra independencia.

La palabra democracia. La palabra libertad. Entonces hay que reconquistar otra vez las palabras. Pero mira, te lo diré más claramente. Ese es el libro. Se titula así, entre otras, entre otras razones, para que todos los periodistas me preguntéis por qué se titula así. Pero bueno, esa es la primera razón. Luego, la segunda y quizá más importante, es que la palabra independencia. A mí me encanta porque tiene muchos significados. O sea, aquí estamos acostumbrados a darle un sentido político, pero tiene un significado personal, moral.

La independencia física, la independencia económica.

Si tú puedes ser tú, puedes exhibir tu independencia en Cataluña, por ejemplo, personal.

Trato de hacerlo, trato de hacerlo. Pero esta novela trata si tú me preguntaste qué va esta novela, de qué trata esta novela, yo te diría esta novela trata de una persona, un chaval que se llama Ricky Ramírez, que busca la independencia personal, económica de manera equivocada. Arrímate a los buenos, le dice a su padre, verdad? Y qué es lo que le dice? Por cierto, la madre del Lazarillo de Tormes, cuando se va de casa, arrímate a los bueno, le dice a su madre, pero éste le dice lo mismo Arrímate lo bueno.

Y qué hace este hombre? Este hombre se arrima a los ricos y se arrima a los poderosos, creyendo que así pues, va a ser como ellos y los ricos, los poderosos. La élite catalana, la élite barcelonesa, lo que hace con él es utilizarlo para sus propósitos perversos y luego usarlo como papel higiénico. Y eso, esto no es una novela política, pero admite una lectura política. Eso exactamente. Carlos Es lo que ha pasado en Cataluña en los últimos años, es decir, en el año 2012.

Y esto no lo digo yo ni es una opinión mía. Carlos Esto es un hecho que te lo cuentan ellos. Además, en el año 2012, todos inmersos en una crisis brutal, las élites económicas y políticas catalanas contribuyeron decisivamente a sacar a la gente a la calle. Para qué? Pues para presionar al Gobierno de Madrid con el fin de salir de la crisis lo mejor posible, con las máximas ventajas posibles. Y cómo lo hicieron? Cómo sacaron o contribuyeron decisivamente a sacar a la gente?

Muy sencillo. Con la utopía que tenían a su disposición, que era la vamos a crear un país maravilloso, separado de estos malditos españoles que ya nos están tocando las narices y nos roban y no sé qué. Vamos a crear un lugar paradisíaco, sensacional, etcétera. Entonces, claro, la gente se lo creyó y salió a la calle. El problema es que ese que se lo creyeron y esas élites, cuando ya la cosa había pasado, quisieron devolver a la gente a casa.

Pero ya no hay manera, porque sacar a la gente a la calle es muy fácil, devolverla a su casa es muy complicado. Carlos. En esas estamos. Esto está ambientado en el año 2025. Excepción acaso incluso mosso, que es Melchor Marín, el hombre que el héroe de Cambrils a investigar el tema. En fin, hoy coge vuelo, coge mucho vuelo. Pero esto está ambientado, como digo, en el 2025, cuando escribiste la novela todavía no había once diputados de un partido en el Parlamento y ya están ahí.

Un partido que algunos que se califican xenófobo califican xenófobo y ya está ahí. Es decir, la realidad va a ir más rápido que tu novela en el 25.

Bueno, es mi novela. Lo que hay es una alcaldesa en el Ayuntamiento de Barcelona que llega al poder con un discurso abiertamente xenófobo, anti islamófobo, etcétera, etcétera, disfrazado de progresista y con la élite económica detrás. Porque la élite económica catalana no ha cambiado en los últimos no sé cuántos siglos. Probablemente son los mismos de siempre. Entonces esta gente apoyan a esta mujer que se presenta con un discurso muy atractivo, aparentemente progresista la xenofobia, el discurso, sino cómo no se ha inventado, ahora se ha inventado ni la ha inventado Salvini y Le Pen en Francia.

Esto viene desde que el mundo es mundo, verdad? Los de la tribu de enfrente son los culpables de nuestros males. Te suena eso, verdad, caduceo? Bueno, pues eso. Pues eso es lo que lo que ocurre en mi novela va a ocurrir en Barcelona, o en Cataluña, o en España. Realmente está ocurriendo en toda Europa. Yo no pretendo tener dotes proféticas, pero. Pero por ahí puede ir la cosa.

La pandemia, cambiar las cosas. Pero. No seremos necesariamente mejores. Ah, no, no, no, para nada. No, no sé, no lo creo. Ya me gustaría, como a todos, pero nunca ha sido así. Bernard Yo decía una cosa fantástica. Decía Lo único que se aprende de la experiencia es que no se aprende nada de la experiencia. O sea, repetimos una y otra vez los mismos errores. PS Verdad? Esto que estamos viviendo nos parece excepcional.

Pero la historia de la humanidad, de la historia de las pandemias. Y no hemos aprendido nada de ella. Seguimos como de las guerras. Seguimos cometiendo una y otra vez los mismos errores. Bueno, vamos a ser mejores? No lo creo. Seremos más o menos iguales.

Le va a gustar. Vives en Barcelona, que es uno de los epicentros de ese magma pro independencia y pro sueños delirantes en muchas ocasiones. Tu crees que la lectura por parte de la mayoría de las personas que te rodean de independencia va a hacerte ganar afecto o desafecto?

Bueno, te voy a dar una noticia que es peor todavía. Yo vivo la mayor parte del Vergès, que es un pueblecito muy pequeñito que es de mayoría absoluta independentista de la isla para entender, entrever desde Barcelona me va a hacer ganar. Esto no es una novela, repito, política es Carlos. Mis opiniones políticas, o sea claras y explícitas, las escribo en un periódico cada dos semanas y me he caracterizado precisamente por ocultarlas. Una novela no funciona de esa manera.

O sea, lo que yo tengo que decir acerca de cualquier cosa de lo que está pasando en España. Eso lo digo en los artículos. Las novelas lo que hacen es plantear problemas complejos de la manera más compleja posible. Es verdad, tienes razón. Claro que esta novela contiene una lectura política que que sí, que no es grata. Seguro que no va a ser grata para, para, para determinadas. Sobretodo para esas élites catalanas que han actuado con gran irresponsabilidad y con gran cinismo y que ahora están asustadas.

No hay un retrato demoledor de esa gente, eso está claro. A ellos no les va a gustar a la gente normal y corriente. Bueno, esto es una novela y una novela. Insisto, lo que intenta es plantear problemas morales. Mira, Carlos, la literatura lo que hace es dar placer. Eso es lo primero. Antes que nada, placer. Sin placer no hay literatura, pero también es una forma de conocimiento. Es como el sexo.

El sexo es una forma. Si no hay placer, no hay sexo y pero también una forma de conocimiento de uno mismo y de los demás. Entonces, a cambio del placer que uno intenta proporcionar, que uno obtiene de las novelas. Cuando alguien me dice Carlos que no le gusta leer, solo se me ocurre darle el pésame o acompañarlo en el sentimiento, porque no se sabe. No sabe lo que es de verdad, no sabe lo que se está perdiendo.

Entonces, a cambio de ese placer que yo intento proporcionar, que proporciona a las novelas, lo que intento es eso, ofrecer una forma de conocimiento. Y en qué consiste? Pues mira, en sacar a la gente de sus casillas, o sea, en obligar al lector a cuestionarse sus propias certezas más arraigadas. Eso es obligarle a veces a empatizar, como se dice ahora. Verdad que es la palabra de moda con gente con la que en teoría nunca empatizar.

Y entonces, a lo mejor lo que más me gustaría es que mis vecinos también les ocurriese eso. Verdad? Que sus creencias más arraigadas de repente, al menos mientras dura la novedad, les no se las pusieran en duda, que se pusieran a sí mismos en cuestión y a lo que ellos creen en cuestión, que para eso sirve la literatura. Y por eso yo creo que la literatura es útil siempre y cuando uno se proponga ser útil. Carlos Que se proponga ser útil se convierte en propaganda, pedagogía y se acabó.

Déjame ser el tu narrativa, tu estilo narrativo. Ha variado algo en esta novela? Sigue siendo el Cercas que todos conocemos y admiramos. Cercas, cercas?

Yo creo que sí. En fin, los lectores dirán yo creo que sí ha habido un cambio en Terra Alta. Eso está claro. O sea, esta novela no lo he dicho, pero quizá debería decirlo. Esta novela es una novela independiente, como su nombre indica. O sea, se puede leer por sí misma. Pero también la segunda parte de Terra Alta, que es la novela con la que me dieron el planeta, va a tener algunas partes más.

Seguramente van a ser un par de volúmenes más. Entonces, ahí enterrado casi hubo un cierto cambio. Por ejemplo, esta novela está protagonizada por un policía y hay gente que la lía como una novela policíaca. Me parece bien. Borges decía que todas las novelas son novelas policíacas y tú has leído mis novelas anteriores y sabes que en todas hay un enigma y alguien que intenta resolver un enigma. Y en el fondo eso es desde Salamina. Además, totalmente.

Y desde antes. O sea, Salamina clarísimamente. Y en todas. Entonces eso sigue aquí, aunque más visible, porque hay un policía y que tiene que resolver un caso, en este caso un caso de extorsión sexual. Alcaldesa de Barcelona. Pero, pero en el fondo yo sigo siendo el mismo de los problemas que planteo. Pues sí, sí es lo mismo. Yo intento renovarme, sabes? Intento no convertirme en un mero imitador de mí mismo, no usar una fórmula sino para poder decir cosas nuevas, no para poder plantear problemas nuevos.

Eso es lo que intento. Pero eso no es esencialmente soy yo. Y el futuro que vas a describir por. Ejemplo la continuación de la independencia en el 2035 será un futuro distópico? No, no, no, no. Porque claro, esto es una cosa rara de estas novelas, es que están situadas en el futuro inmediato. Es decir, esta está situada en el dos mil veinti cinco, pero eso es 2025. No es muy distinto del actual?

Pues claro que no. Porque si tú piensas en cinco años atrás, o sea que el año no sé, 2015 más o menos, todo da lo mismo. O sea, en el 2025 no va a haber platillos volantes, ni extraterrestres con antena ni nada parecido, verdad? Había hace cinco años, había internet, había teléfonos móviles, había el mundo era más o menos parecido. Entonces ni 2035 va a ser distinto.

Pero no creas que tan distinto de la actual preguntas que hace Goyo González, aparte parte de la literatura a independientemente de la literatura. Qué le da de comer a la bestia que lleva dentro?

Todos llevamos una bestia adentro. Esto es muy importante. Todos llevamos una bestia dentro. Lo llamaba Bataille. Llamaba a la parte maldita. Todos llevamos la bestia dentro. La literatura lo que permite es sacar justamente esa bestia, o sea, la parte escondida. Que verdad es, pues la furia, el dolor, la apetencia de muerte, como le llamaba García Lorca. Es un verso precioso. Todas esas cosas las metemos en la literatura. Y qué me da de comer a mí aparte de la literatura?

Pues la verdad, claro que me da de comer muy bien. En fin, es una cosa muy satisfactoria, pero también me alimento otras veces del el cine, por ejemplo, la música, como todo el mundo.

De qué color es el cristal de las gafas de cerca?

Pues transparente. Total, creo. Y de las gafas de lejos.

A mí me parece que tal vez el futuro con claridad.

Por tanto, no, no soy un profeta. No tengo, no tengo esas facultades, no el pasado. Con ver el pasado me conformo.

Me gustaría conocer su opinión sobre la alcaldesa de Barcelona en 2021, en 2021, la actual Ada Colau.

Acabo de encontrármelo ahora mismo muy simpática. Está muy asustada porque cree que le han dicho que es la protagonista de mi novela. Bueno, asustada, pero está un poco nerviosa, dicho tranquila. No, no, no lo es eso. Es la sucesora. Ya ha colado, no? Y además, claro, esto es ser un personaje de una novela. La gente le pone nervioso. Yo mismo soy personaje de independencia, verdad? Es decir, los lectores.

Perdón. Hay personajes de Independencia que han leído Terra Alta, la novela anterior, protagonizada por Melchor Marín, que es el protagonista de Independencia, y le dicen Oye, Melchor, tú has leído tal libro, esta novela de la cuadres protagonista. Y él dice que no, porque sólo leer novelas del siglo XIX. Y es más, aparece este Javier Cercas, del cual alguno, un personaje, dice que es un liante de cojones. Me parece que dice otro personaje que es el que es el padre putativo de Melchor Marín, cuando se entera de que.

Se llama Vivales, es un tipo fantástico. Y cuando se entera que hay un tipo que se llama Cercas, al que le llama está muerto de hambre. Ha escrito una novela sobre Melchor Marín, sobre su amigo, sobre su casi ahijado. Y qué quieres que le metamos un pleito a este ser? Casquero, un muerto de hambre y de lo dice. Pero por qué le vamos a meter un pleito? Yo lo estoy ayer. Cualquier excusa es buena para meter un pleito a bien, ya que dicho de otra manera, el humor empieza por uno mismo y si uno no es capaz de reírse de uno mismo, no tiene derecho a reírse de nadie.

Me parece a mí ya por último, qué haría si fuera el presidente del Barsa?

Jajaja, eso sí que es complicado. No lo sé, realmente no lo sé. Eso está muy complicado. Muy, muy, muy difícil está la situación.

Quedarme con Messi, al menos no me parece eso. Pues me parece que eso va a ser complicado. Sí, porque me parece que está Yauco. Tiene el billete a París? No sé. Ya veremos. Recuerden ustedes, aquellos que estén fascinados por la narrativa de Cercas, que es una narrativa que va lejos. Déjense ustedes caer por su librería favorita o por su libro electrónico y háganse con independencia y terral con todas las demás. En cualquier caso, que siempre es una buena razón para cultivarse durante algunos minutos y entretenerse y recrearse en uno de los estilos narrativos más brillantes ahora mismo en nuestro idioma.

Querido Javier, un abrazo muy fuerte. Enhorabuena, Carlos, muchísimas gracias por tu generosidad y un abrazo.