Casualidad que nos llegó esta mañana una carta de una buena amiga de Candela Peña, que voy a leer si, si a Candela no le parece mal. Dice la carta a continuación quiero compartir con vosotros la que con seguridad es mi película favorita de entre las miles que he visto a lo largo de los años. Y hablo con conocimiento de causa porque yo he trabajado durante muchos años en un cine.

Mi película favorita comienza en 1973. Es un buen año. 73 Antonio y su mujer Pepa acaban de tener una niña y en pantalla se les ve a los tres felices. Unos planos recurso de las calles del pueblo donde viven en Gavà. Un sitio pequeñito, costero muy bonito entre Castelldefels y Viladecans y con un poco de música y con cámara rápida. Se ve ahora como la niña va creciendo desde que es un bebé.

Pasan escenas diferentes de su infancia, o sea, su abuela materna que la llama churri. I am i i Valtonyc madre. Sus padres montan un bar, miran el bar es este y en muchas de las escenas se ve que la niña va a la playa con ellos, veces con su madre y otras con su padre. Cuando va con su madre, pues se lo pasa pipa cuando va con su padre. Es algo todavía más especial, porque se ve que la niña está deseando llegar porque le encanta ese sitio al que van.

Aunque es un club que se llama El Tropical, donde siempre se pide un bitter con hielo, limón y una aceituna. Y ahora, ya de vuelta al bar de sus padres también.

Pepa pues mira a la chiquilla y caminar entre las mesas. La cámara se mueve ágilmente con ella. No para quieta, jugueteando y moviéndose como si sintiera que está en una representación. Ya con público se para un momentito al lado de su papá, que está echándole las cartas a un cliente. Mi madre se acerca a ella y le dice que vaya a ver al señor Ramón, que seguro que la deja pasar. Con suerte, añade, llega a tiempo a la próxima sesión.

La niña entusiasmada. A qué brillo tiene ahí? Especial en los ojos. Plano general de la calle. Vemos a la niña salir del bar a toda pastilla. Echa a correr hacia el local de al lado, que resulta que es un cine y la cámara enfoca su entrada en la que se puede leer en letras grandes cine Maragail.

La niña entra con la confianza de haberlo hecho antes cientos de veces.

Y éste debe ser el señor Ramón, que es el acomodador. Ella le saluda como si fuera su amigo y él la invita a pasar a ver la película que están poniendo. Ella insiste en hacer antes uno de sus numeritos. Cómpranos amplios. Ahí vemos como sube y baja las escaleras del cine, pone caras al posturitas y miradas como si fuera una estrella de la pantalla. Ahí hace un baile porque ella quiere ser bailarina y está estudiando danza.

Y el señor Ramón le abre la puerta y ella entra y se sienta, se sienta a mi lado, porque yo desde aquí nos dice esta amiga que escribe la carta.

Yo la he visto emocionarse muchas veces, reír, llorar, hacerse mujer aquí ha merendado aquí ha cenado, aquí me ha dejado pringosa de comida en varias ocasiones. Aquí fue donde se excitó por primera vez. Fue viendo vestida para matar, que sale ahí Angie Dickinson.

Era la mujer policía y le quitas las medias en la parte de atrás de un taxi, dice la carta.

Tengo mucha suerte de haber podido ver e incluso hacer partícipe de toda esta película que os estoy contando. Casi no me he perdido ninguna secuencia. De hecho, cuando se acercaba lo que parecía mi final porque iban a derribar este cine, yo que sólo soy una butaca. Una butaca de toda la vida fui rescatada por ella, por la protagonista de la película y me llevó a su casa. Y desde aquí, que es donde ahora vivo, he podido disfrutar de sus éxitos.

Fue su estreno como actriz en Días contados con Imanol Uribe y de sus tres premios Goya y del nacimiento de su hijo, que va a cumplir 9 horas y de sus alegrías y tristezas.

He sido espectadora privilegiada de su vida. Yo, butaca veterana, butaca que tantas películas he visto. Me quedo con la suya, con la película de la vida de Candela Peña.

Bueno, qué tal está bastante la peña que no te he preguntado todavía? Ay, qué chulo! Bien, muy bien. Hay datos que son tal. Pero bueno, hay cuéntame cuáles son. No, no, no, algunos pequeños, pero igual el cine se llama de otra manera.

No, no, pero que el bar era más chiquitito, no había mesas, era sólo una barra en el señor Ramón no me decía nunca.

Pasa antes de que yo le hiciera el chow porque quería Chow, quería vallecito, no, y quería que no fuera tan fácil el acceso al cine. Y me decía Ay, qué aburrido estoy, gandula, quedate aquí.

Sabéis que esta mañana he hecho una encuesta aquí entre la gente de la redacción? He dicho Eh? Tú dónde dirías que nació y creció Candela Peña? Y entonces me han dicho Eh! Extremadura, Andalucía. Sobretodo me han dicho Madrid.

Y si te lo digo, te voy a decir que es de Madrid.

Sí, un montón de bueno, un montón. Los siete que he tenido tiempo de preguntar Ansian. Pues tiene que ser del centro de Madrid, han dicho de la baja del del Rastro.

Y nada. Y cuando les he dicho sabéis que Candela Peña nació en Gabaa? O sea que nací en Catalunya?

SOC Catalana nadie. O bueno, nadie. Hay mucha gente que te ve madrileña. Bueno, llevas mucho tiempo viviendo en Madrid. Es verdad.

La verdad es que llevo más tiempo en Madrid que en Barcelona, pero claro, pero soy hija también de emigrantes.

No soy hija de murciana y sevillano, nacida en Barcelona y luego aquí, y yo no sé muy bien de dónde me siento, eh?

Pues pues ahora mismo de aquí que es exacta del programa. Exacto. Soy de tu programa desde el programa más de un salto.

Bueno, Candela Peña está aquí para hablarnos de una de las 120 películas que has hecho últimamente. Qué bien!

Es un buen año.

Es que me da miedo decir algo porque no lo sé. O sea, si me quejo, me critican y tal. No sabes qué me da rabia?

Que te advierto que no estarás tú hecha ya que te critiquen por decir cosas de la historia de tu vida.

Sí, la verdad es que sí, pero no sé por qué. A De Yo soy silenciosa y estoy mucho en mi casa. Yo sólo salgo para estas cosas. Lo que pasa es que ahora estoy de promoción de tres películas que se me han juntado, pero las había rodado en años diferentes. Ahora me quedo sin nada en el tintero para el año que viene.

O sea que son de años distintos. Esta es la boda de Rosa, que ya hablasteis de ella este verano. Salir del Ropero y Black Beach.

Esta es la que se estrena el viernes el viernes a las 23 25 Blacksmith, que es la que estás con Raúl Arévalo. Oye, lleva teniendo unos años también Raúl Arévalo.

Te das cuenta de que Raúl Arévalo es uno que todo el rato te dicen, te dice a mí me gustan las maduritas Candela y tú eres mayor que yo, digo, pero porque tienes que decir en todas las entrevistas que soy mayor que tú, eres mayor que él, pero muy poco vale, se conoce muy poco.

Sé que esa es otra de las cifras que está mal. Yo tengo cuarenta y cinco años, cuarenta y cinco años.

O sea, te chavalin el 33, no 705 75 si estamos en el 2020, es verdad.

Claro, yo soy del 69 y la raglan no sé de qué año es, pero Raúl debe tener igual. No, Raúl igual no tiene ni 40.

No, seguro que tira.

No lo sé. La verdad es que no lo sé. Pero ha sido el mejor compañero del planeta para este viaje de Black Beach. Es que yo no conocía el África negra y lo de Ghana ha sido fuerte. Osea, había momentos que nos mirábamos y nos daba hasta la risa, pero por no llorar de lo que estábamos viendo, oliendo y comiendo, porque él dice que no, pero hemos comido rata y perro.

Así el dice a Candela Pero por qué cuentas eso? Digo coño! Porque es verdad. Osea, tú ibas por las carreteras y habían unos señores con unos palos y tres ratas y luego en el rodaje comíamos una carne muy dura y muy picante.

Coño, pues no sé. Blanco y en botella. Y luego vimos como un perro lo asaban así, como si fuera un pollo asado como yo a las 11. Qué agradable!

Pues fui la única del rodaje que no se puso enferma. Yo creo que soy que el Titanic se hunde y ahí me quedo yo.

Es una película en la que hay muchas escenas de acción. En la que tú conduces un montón porque estás ahí con la picarla en la camioneta y. Pero me han contado esto. No sé si me han dicho si es que conduce de verdad como una loca.

Por cierto, si te encanta conducir haciendo el cabra jaja nombre me encanta conducir aquí en Madrid normal. Pero osea, es que esta película yo tampoco tenía mucho que hacer porque el personaje top es el de Raúl y yo un poco. Es que este man espero que no se moleste, pero yo lo que quería era conocer el África negra, coincidir con Raúl Arévalo que no? Tal que no habíamos trabajado nunca juntos y trabajar con Carreño o con el jefe de especialistas que me acuerdo que me citó en el parking del Wanda el primer día para ver cómo yo conducía.

Y me dijo súbete en el coche, subiera el coche, hice dos rectas y me dijo Está preparada?

Vio que me enrollaba, pero luego, como era una película de estas de Netflix, con muchísimo dinero, yo tenía que la vida. Yo tenía doble de luces y doble de especialista. Digo y qué hago? Ya para qué he venido yo entonces?

El doble de luces? Pues doble de luces.

Es que para que tú no pases calor, porque aquello era muy fuerte. Hay otra muchacha y tú estás en la ruleta y al fresco. Y cuando ya se ha probado, total, sales tú, claro. Y yo eso.

No, no, no, no. Nunca me había pasado. No tengo mentalidad de pobre. Yo eso no lo puedo soportar. Que una muchacha esté pasando calor por mí. Entonces ella estaba en la roulotte cobrando y yo fuera pasando calor. Y la especialista. Lo mismo es que le dije yo quiero probar con el coche, o sea, quiero hacerlas y no tenéis un golpe. Osea, tuvisteis un golpe.

Bueno, ayer no llegamos a tenerlo porque Carreño me dijo si pasa algo se derrapa así y en este terreno pasa esto, nos quedamos a cinco centímetros de matarnos en una pared, pero no pasó nada porque yo soy la gran precisión Driver.

Osea que no pasó nada, pero es irregular y lo duro que puede figurar como bajo del coche pues demacrados no, no, ya te he dicho alguna vez que has tenido que aguantar mucho a Raúl Arévalo en África, no?

Lo que pasa es que no, lo que quiero decir es que yo no soy lo que parezco. La gente me toma la matrícula cambiada.

Sí, porque la gente piensa que yo soy como y soy una persona tranquila, centrada, responsable. Los rodajes. Yo soy plastilina y me gusta mucho trabajar en equipo y si veo que alguien afloja, pues ahí estoy yo. O sea, me gusta que esté todo equilibrado. Raúl pensaba que yo era mucho más nerviosa y no, Raúl es mucho más nervioso que yo. Pierde los nervios más que yo. Y entonces hay directores Esteban Crespo, por ejemplo.

Él se siente más cómodo moviendo tanques y moviendo helicópteros, moviendo a Raúl Arévalo.

Entonces yo a Raúl lo he dejado muy bien, lo he toreado muy bien y me vi.

O sea, le vengo bien y él a mí. Aquiles Sí, el equilibrio.

Sí, la verdad es que me gusta y me gustan también sus idas de olla y me encanta él.

Qué pena que ya traemos a Raúl Arévalo. El teléfono de aludidos prosiguiera.

Sí, porque los dos somos muy pimpinela juntos. La hora me estaría rebuznando. Eso no es verdad. Tú no sé cuántos, pero ahora, como estoy sola, aprovecho, aprovecho.

Así que también he visto el otro día dijiste en Europa FM el punto en que has escrito una serie.

Sé que has escrito, no sé bien si es que a mí el osea, yo en febrero me fui a la Isla del Hierro a rodar la segunda parte de la serie y nos pilló y estaba rodando tres semanas y nos pilló hoy el confinamiento. Entonces decidí no venirme porque pensaba que iban a ser 15 días o algo así y movià estar majísimos. Me dijeron Candela, te pagamos la casa mientras tanto y yo como vengo de familia pobre, pensé Candela trabaja, te están pagando la casa, trabajas aquí.

Y entonces empecé y tenía hace ocho años que Pilar Často y yo teníamos la idea de escribir puerto y camino. Habíamos, sabíamos lo que queríamos, pero nunca había tiempo, nunca tal. Y aproveché para escribir y a mi camino a seguir. Que si Isabel Coixet le iba mandando los textos y le gustaba mucho Candela sigue, sigue, sigue. Y escribí los ocho capítulos. Me dijo que me los producía, pero ahora estoy con ese peregrinaje de a ver quién pone el dinero, porque una productora no es la que pone el dinero, es la que gestiona el dinero que nos pongan otros.

Esto lo digo porque la gente yo no lo sabía, pero ahora me han dicho que no es común que se escriban ocho capítulos, porque en realidad la gente que pone el dinero te paga como un desarrollo y ellos te van un poco haciendo al cauce del río y este río ya va hecho.

Estoy abierta a todo, es un producto ya cerrado.

Bueno, pues sí, entonces creo que esto que coño, ya me lo podían haber dicho, que esto no era buena idea. Bueno, pues esto se llama el desconocimiento, por eso hay que aprender mucho, estudiar mucho y saber mucho.

Pues te gusta escribir. Entonces, si esto no es lo primero que escribes, la serie no escribiste.

Escribí Bueno, y sobre todo he dado más clases de guión, pero desde el actor y escribí una novela hace mucho tiempo que se llama Pérez Príncipe María Dolores.

Y sí, lo que pasa es que he estado como diez años, un poco en la parra, por muchas razones.

Sí, murió mi padre y me me desestabilizó muchísimo porque el día que murió. Yo salí de cuentas de este hijo y. Ha sido raro. Son las doce, ya llegan las noticias de esta hora.

Pues el otro día seguimos hablando porque se han quedado 27 cosas que contar. Ya se acaba el rollo. Pues sí, fíjate, porque ahora vienen las noticias. Ya hablamos de lo del coronà Virus y oí a esa mujer se lo están haciendo en la tele.

Es que a esa mujer le están haciendo eso en la tele? Pues creo que sí.

Estoy flipando ya con las televisiones. Bueno, que ande la peña hasta el próximo día. Adiós. Adiós. Cuando tú quieras te dejas.